Esta vez hemos ido a caer un poquito lejos, nada más y nada menos que a orillas del Danubio a su paso por Bratislava (Eslovaquia). Y estando uno de los nuestros por allí y siendo la vigésima edición de su media maratón... ¿cómo íbamos a mirar para otro lado o conformarnos solo con ir a animar? Nada de eso, nosotros no vemos los toros desde la barrera y Jesús que nunca viaja sin meter las zapas en la maleta, se encargó de representarnos en el evento.
Esta fiesta deportiva tiene varias modalidades a elegir (maratón, media por relevos, diez kilómetros...) y nuestro compañero se decantó por el equilibrio perfecto entre larga distancia y velocidad que lleva implícito la prueba de veintiún kilómetros. Pues eso, que ni corto ni perezoso y en compañía de algunos compañeros de trabajo, se plantó Jesús en la línea de salida de este evento que transcurre en parte por el bellísimo centro histórico de la ciudad con un recorrido llano pensado para disfrutar.
A las nueve en punto, pistoletazo de salida y... ¡a correr!, y tan solo 1h 36' y 22'' después y cara de habérselo pasado en grande, ya estaba nuestro compañero con su medalla al cuello. ¡Enhorabuena, Jesús!
Como siempre, cerramos con algunas imágenes de lo que fue esta jornada tan especial para acercarnos a la experiencia de nuestro querido compañero al que esperamos tener pronto de regreso para volver a compartir algún que otro entrenamiento dominguero por el Parque de Los Cerros .
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